Aunque aún falta terminar de montar, no he podido resistirme a poneros las fotos... poquito a poco voy dominándo el torno, también aprendo nuevas técnicas para teñir la madera y me gusta mucho los resultados
La madera que he utilizado para realizar este pié de lamparita, es de castaño, la elegí por tener una veta muy marcada y me gusta mucho el resultado que adquiere si se tiñe.
Y este ha sido el resultado final, espero que os guste y que tengaís un buen fin de semana.
La madera que he utilizado para realizar este pié de lamparita, es de castaño, la elegí por tener una veta muy marcada y me gusta mucho el resultado que adquiere si se tiñe.
Aquí se aprecia el teñido, antes y después de bruñir
La base es demasidado pequeña para mi gusto, pero no pude hacerla más grande ya que la madera de que disponíamos en el taller, no me daba el diámetro necesario que yo quería... aunque no descarto volverla ha hacer, ya que he pensado encolar dos piezas que sean lo suficiente grandes para conseguir lo que en principio había proyectado
El teñido de la madera está realizado con vinagre de vino al cual se le añade un buen trozo de estropajo de aluminio, dejándolo macerar hasta que el dicho estropajo se disuelve y desaparece... parece mentira, pero el vinagre se oxida y hace que se convierta en un tinte natural.
Los taninos del vinagre junto con los de la madera que elijamos para teñir, será el resultado del color que quedará. Así pués, antes hay que hacer una prueba... también según las capas que le demos quedará más o menos oscuro.
Para sacar las vetas, lo bruñí con un estropajo de aluminio de 000
después le apliqué una pasta de texturizado y lo volví a bruñir con las mismas virutas que habían quedado del torneado, así de esta manera al mismo tiempo se va puliendo y queda un brillo natural.
Para acabar le dí una cera de fricción, aplicada con trapo de algodón y frotándola hasta sacar el brillo deseado.